Plantéatelo así: Durante 10 meses lo que vas a hacer va a ser trabajar, estudiar, pasar frío, tener pereza de la vida, quejarte y ver cómo pasa otro año.
A ver, si vives a cuerpo de reina, eres multimillonaria y tal, igual no te sientes identificada con este post. Para el resto de mortales, los Viajes de Amigas (sí, con mayúsculas) son imprescindibles y ya está. Estos son mis cinco puntos de beneficios vitales de los Viajes de Amigas.
- Compartir dudas, quejas y consejos sobre sexo es un must have. “¿Es normal hacerlo sólo una vez al mes?”, “el mío no es nada sutil al empezar”, “en la cocina lo suyo es hacerlo nosedonde y nosecomo, y a poder ser que no haya aceite cerca, por aquello de no resbalarse y abrirse la crisma”. Gracias a estos viajes, me siento más comprendida y me han convalidado el curso de prevención de riesgos sexuales.
- Hablar como loros sin límite de tiempo. No hay que parar para trabajar, estudiar, atender a otras personas, ni siquiera el móvil. Carta blanca para hablar tooooodo el santo rato. La temática pasa de amigos a safari, de familia a arquitectura, de geografía a cacas, en un segundo. Gracias a todo esto soy más culta y satisfago mi necesidad de hablar de cacas de, por lo menos, 3 meses.
- Dormir como momias sin límite de tiempo. A no ser que el viaje incluya la amiga-que-madruga-y-todos-deben-madrugar-con-ella, esto es así de maravilloso. En la playa, en la pisci, en la cama, en el coche, ellas te dejan dormir o se duermen también. Porque estamos de vacaciones, y porque ellas saben de tu necesidad (y de la suya) de descanso intenso. Gracias a eso seremos personas agradables en los meses duros, cuando haya que madrugar.
- Los recuerdos. El rato jugando a “Furor” en el que casi me meo; cagar con la puerta abierta, los pedos de la finolis, un concierto en la playa , hacernos trenzas las unas a las otras, los ojeamientos de maromos, que mirar es gratis, y otros muchos momentos que nos quedaremos para nosotras.
- Las risas. LAS PUTAS RISAS. Es mi punto favorito. No sé si son las endorfinas o los gamusinos, pero reírte a carcajada limpia con tus amigas es salud, es alegría y felicidad. Además fortalece el vínculo, porque yo no sé vosotras, pero yo a quien más quiero del mundo es a quien me hace reír. Y a estas locas las tengo que adorar, porque me llevo meando de la risa cinco días.
Hay que hacerlo, es obligatorio, sólo tiene beneficios. 🙂
¿Cuáles son vuestros puntos, titis?
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